Los psicólogos han sugerido que el amor verdadero es una conexión de tres partes que implica atracción, conexión y compromiso. Sin embargo, dado que "amor" no tiene una definición universal, el amor verdadero es subjetivo.
La idea de los tres componentes del amor verdadero fue originalmente propuesta por el psicólogo Robert Sternberg. Sternberg imaginó el amor como un triángulo donde los tres puntos tenían que estar conectados para que el sentimiento fuera completo. Cuando la intimidad y el compromiso se conectan, el resultado es compañía. Cuando la pasión y el compromiso se conectan, dan como resultado lo que comúnmente se denomina "amor ciego". Cuando la pasión y la intimidad se conectan, se traducen en romance.
Además, Sternberg afirmó que las personas experimentan las fases del amor en un orden específico. Creía que el enamoramiento es el primer indicio de amor que todos sienten. La infatuación, sin embargo, es principalmente física y no puede, por sí sola, producir o sostener el amor verdadero. Es necesario conectarse con la otra persona para crear un vínculo que se extienda más allá de lo físico. La intimidad es también la forma en que las personas establecen confianza entre sí. Cuando dos personas establecen vínculos físicos y emocionales sólidos que resisten las pruebas y la prueba del tiempo, se comprometen entre sí. Solo cuando dos personas están comprometidas entre sí, pueden estar verdaderamente enamoradas.