Se supone que el mes de enero lleva el nombre de Janus, un dios romano de dos caras que simbolizaban los inicios y las transiciones. En la mitología, una de las caras de Janus miraba hacia el futuro y la otra hacia atrás al pasado, al igual que enero es un período de transición a un nuevo año.
El mes de enero no existió hasta aproximadamente 700 a. de C., cuando el Rey Numa Pompilius agregó enero y febrero al calendario para crear un calendario con un año lunar completo. Anteriormente, el calendario romano tenía solo 10 meses, el invierno había sido considerado como un período de no meses y marzo era el primer mes del año. El mes experimentó un cambio adicional cuando Julio César agregó un día 31 a enero en 46 a. C., ya que era el primer mes y comenzó cada nuevo año.
Aunque enero suele considerarse un mes particularmente frío y nevoso en el hemisferio norte, se considera uno de los meses más cálidos del hemisferio sur. La piedra preciosa que representa los nacimientos de enero es el granate, un silicato rojo. Enero es el dominio de dos signos del zodiaco separados, Capricornio y Acuario, con Capricornio representando la primera mitad del mes y Acuario cubriendo el 20 en adelante.
