Los koalas comen hojas, y el eucalipto es el alimento más importante en su dieta. Los koalas tienen mandíbulas muy fuertes, lo que les permite masticar hojas resistentes y fibrosas. Las hojas de eucalipto tienen una nutrición muy baja y contienen una toxina que se filtra a través del sistema digestivo. Los koalas utilizan su agudo sentido del olfato para diferenciar entre los tipos de licencia y determinar la cantidad de toxina que contienen.
Un bebé koala, o un joey como se le llama, se alimenta de leche mientras vive en la bolsa de su madre durante aproximadamente seis meses. Después de salir de la bolsa, el joey vive en la espalda de su madre durante aproximadamente seis meses más, subsistiendo tanto de la leche como de las hojas de eucalipto. Después de aproximadamente un año, el joey se retira de la leche.
Los koalas solo comen 50 especies de eucalipto, de las 700 en Australia. Sus afiladas garras y miembros fuertes les permiten trepar troncos de árboles. Los koalas tienen colas con relleno grueso, lo que les ayuda a sentarse en los árboles durante horas a la vez. Tienen cuatro dedos y un pulgar oponible en cada mano para agarrar las ramas. Tienden a ser criaturas solitarias, y los machos marcan su territorio frotando una glándula de olor contra los árboles.