Los tiburones martillo, los grandes meros, las garzas y los humanos comen rayas. Los tiburones martillo, su mayor depredador, han desarrollado sensores especiales en sus cabezas que les permiten encontrar rayas escondidas bajo la arena.
Recientemente se ha descubierto que las grandes garzas cazan pequeñas rayas en aguas poco profundas. Los humanos también son consumidores de carne de raya. Las rayas generalmente se capturan para el consumo local, pero los platos que incluyen la raya son cada vez más populares.
Las rayas no son animales agresivos y eligen esconderse debajo de la arena durante el día. Sin embargo, si están amenazadas, las rayas pueden usar su cola afilada y espinosa para apuñalar a un atacante.