La mayoría de las personas hablan a sí mismas como una extensión de sus procesos de pensamiento interno. La investigación ha demostrado que hablar con uno mismo es generalmente psicológicamente saludable e incluso beneficioso. Sin embargo, el uso excesivo de la práctica podría ser un signo de problemas mentales.
La mente humana a menudo conversa a sí misma, y las personas razonan a través de los problemas y piensan acerca de las ideas a través de este fenómeno. Si bien estos pensamientos generalmente no están verbalizados, algunas personas los dicen en voz alta en alguna ocasión. Muchos encuentran que les ayuda a mantener sus pensamientos en el objetivo, y puede ayudar a las personas a mantenerse enfocadas. Sin embargo, puede ser una molestia para otras personas cercanas, por lo que la mayoría de las personas solo lo hacen cuando están solos.
Hablar con uno mismo también puede revelar una variedad de patrones de pensamiento. Las personas generalmente no dedican toda su atención a los pensamientos en sus mentes, y pueden no ser conscientes de los patrones de pensamiento negativos que pueden surgir. Los pensamientos verbales pueden dar a las personas una herramienta útil para la reflexión.
Sin embargo, algunos problemas psicológicos pueden hacer que las personas hablen con ellas mismas. Los que sufren de esquizofrenia, por ejemplo, a menudo presentan este síntoma. En algunos casos, pueden estar hablando con otras personas que no están cerca pero que creen que existen. Sin embargo, quienes sufren de esquizofrenia a menudo presentan otros síntomas claros además de hablar con ellos mismos.