En general, los mamíferos terrestres, la mayoría de las ardillas tienen la capacidad de nadar a la manera de los perros. Usan sus largas y espesas colas para manejar, tanto como un barco usa un timón. Por lo general, entran al agua solo cuando surge la necesidad.
Debido al tamaño bastante pequeño de la mayoría de las ardillas, no son los mejores nadadores de distancia, y en ocasiones se ahogan si no llegan a la orilla a tiempo. Aunque la mayoría de las razas, como la ardilla roja y la ardilla gris del este, son capaces de nadar, la ardilla voladora no puede. Las aletas adicionales que permiten que las ardillas voladoras se deslicen en el aire las obstaculizan en el agua.