Según Shark Savers, los tiburones son importantes por el papel que desempeñan en los océanos. Los tiburones tienen un efecto positivo en las redes alimentarias, las poblaciones oceánicas y la salud del hábitat.
Los tiburones son comedores eficientes, que suelen consumir peces que son más viejos, más lentos o más enfermos. Esto mejora la salud de la población general de los peces de los que se alimentan los tiburones. Además, los tiburones sirven como un tipo de control de la población porque se aseguran de que las poblaciones de las que se aprovechan no crezcan lo suficiente como para amenazar el ecosistema. Por esta razón, los tiburones se consideran especies clave en sus redes alimentarias, y la reducción o eliminación de tiburones puede llevar a la pérdida de muchas otras especies de vida marina dentro de esa red alimentaria.
Además de alimentarse de los peces más viejos, lentos y enfermos, los tiburones también consumen canales muertas en el océano. Esto evita la propagación de enfermedades que podrían afectar negativamente a otras vidas oceánicas.
Finalmente, los tiburones ayudan a mantener ciertos hábitats oceánicos saludables a través de la intimidación. Sin los tiburones para asustarlos, cierta vida en el océano sobregrasa ciertas áreas, como las tortugas que destruyen un hábitat en ausencia de los tiburones que los atacarían. La presencia de tiburones ahuyenta a esas tortugas y finalmente evita que destruyan estos hábitats y afecten negativamente al ecosistema.