Las razones por las que el pescado no se considera carne con el fin de ayunar incluyen las diferencias ambientales y la intención detrás del ayuno. Hay diferentes opiniones basadas en diferentes interpretaciones de textos religiosos.
Aunque algunos vegetarianos permiten el pescado en su dieta, el concepto de permitir el pescado tiene raíces religiosas. Durante la Cuaresma, los católicos deben abstenerse de comer carne los viernes, pero muchas iglesias católicas modernas celebrarán eventos de fritura de pescado durante la Cuaresma.
Una posible razón para permitir que los católicos coman pescado es la distinción que se hace entre los animales sin litoral, incluidas las aves, y las criaturas acuáticas, como los peces. Otra posible razón, mencionada en los escritos de Santo Tomás de Aquino, es que la carne roja estaba prohibida porque era "un gran incentivo para la lujuria", una característica que no posee el pescado. Finalmente, la idea de que la carne roja provenía de animales de granja significaba que abstenerse de la carne roja implicaba hacer un sacrificio de la propiedad.