En la tabla periódica, los elementos generalmente se vuelven más metálicos en un grupo. Sin embargo, los elementos tienden a ser menos metálicos en un período.
Cada elemento de la tabla periódica está representado por un símbolo atómico, un número atómico y un peso atómico. Estos elementos están organizados de izquierda a derecha en números atómicos crecientes. Las filas horizontales de elementos se denominan puntos, mientras que las columnas verticales se denominan familias o grupos.
Los elementos que pertenecen al mismo grupo exhiben propiedades atómicas similares. Un método para etiquetar los diversos grupos es designar los números del uno al 18 de izquierda a derecha. Ciertos grupos tienen nombres específicos para distinguirlos de otros grupos. Los elementos del grupo uno, excepto el hidrógeno, se denominan metales alcalinos, mientras que los del grupo dos se denominan metales alcalinotérreos. Los elementos que pertenecen al grupo 17 son los halógenos, mientras que los del grupo 18 se conocen como gases nobles. Los elementos también se clasifican como metales o no metales.
Los elementos exhiben tendencias o patrones periódicos. Estos patrones caracterizan la naturaleza de los elementos dentro de un grupo o período. Algunas de las principales tendencias incluyen el carácter metálico, la energía de ionización y el radio atómico. El carácter metálico se refiere al grado de reactividad de un elemento, que corresponde a la facilidad con que pierde un electrón. Cuando se desciende de un grupo, las propiedades metálicas tienden a aumentar, lo cual es un resultado directo del aumento de los tamaños atómicos.