La religión desempeña un papel en la sociedad, aunque su función depende de la estructura y dinámica de la población. La religión fue un tema que se menciona muchas veces en la Constitución de los Estados Unidos, lo que garantiza la Capacidad de un estadounidense para ejercer la libertad religiosa.
Ya sea dictada por los gobiernos o motivada informalmente en una población, la religión puede servir como un impulsor de la virtud y los valores morales en una sociedad. En algunos casos, las instituciones gubernamentales y los sistemas legales se basan total o parcialmente en una fundación religiosa. La religión también se vincula con valores culturales que afectan las formas en que los individuos, las familias y las comunidades se interrelacionan.