Los posibles síntomas de tener demasiado yodo en el cuerpo incluyen una sensación de ardor en la boca, garganta o estómago, pulso débil, diarrea y vómitos, según la Oficina de Suplementos Dietéticos. Las personas que consumen cantidades excesivas de yodo también pueden sufrir dolor de estómago, náuseas y coma.
Los efectos de los niveles altos de yodo en el cuerpo son similares a los síntomas de la deficiencia de yodo, señala la Oficina de Suplementos Dietéticos. Las personas que toman muy poco o demasiado yodo son propensas a desarrollar bocio, una glándula tiroides inflamada y cáncer de tiroides.
La ingesta máxima diaria de yodo para adultos es de 1,100 microgramos y 900 microgramos para adolescentes de 14 a 18 años, afirma la Oficina de Suplementos Dietéticos. Los niños de 9 a 13 años no deben tomar más de 600 microgramos de yodo, y los niños de 4 a 8 años no deben exceder una ingesta de 300 microgramos. Aquellos que toman yodo para problemas médicos, como la deficiencia de yodo, pueden tener diferentes limitaciones en el consumo de yodo.
La deficiencia de yodo hace que el cuerpo produzca cantidades inadecuadas de hormona tiroidea, dice la Oficina de Suplementos Dietéticos. La deficiencia grave de yodo puede provocar daños permanentes en el feto, incluido el crecimiento atrofiado y el retraso mental. Es esencial para las personas obtener cantidades adecuadas de yodo de una variedad de fuentes alimenticias, especialmente pescado, productos lácteos, frutas y verduras.