El ejercicio influye en el sistema esquelético principalmente por el impacto en los huesos y el aumento de la masa muscular y el poder, según Nature.com. Esto desencadena una remodelación de los huesos, ligamentos y tendones, que son Fortalecido y saludable a través de varias formas de ejercicio. Dos de las formas más efectivas de mejorar la salud del esqueleto son el ejercicio y la nutrición.
De acuerdo con un artículo en Sport Medicine, los mejores tipos de ejercicios para mejorar la salud del esqueleto son las actividades de carga de peso porque obligan al deportista a trabajar contra la gravedad. Senderismo, entrenamiento con pesas, trotar y jugar al tenis se consideran actividades con peso, pero las actividades como la natación y el ciclismo también son ejercicios con peso. Tanto los hombres como las mujeres comienzan a perder masa ósea tan pronto como a los 20 años, y este proceso puede reducirse considerablemente a través de un régimen regular de ejercicios con pesas.
Según la Clínica Mayo, la probabilidad de desarrollar osteoporosis, una condición en la cual los huesos se vuelven débiles y frágiles, depende de la cantidad de masa ósea que alcanzan los individuos a la edad de 30 años y de la rapidez con que la pierden. Ambas condiciones pueden verse influidas por el ejercicio regular que comienza en la infancia y continúa después de alcanzar la masa ósea máxima. Las personas que están físicamente inactivas tienen un mayor riesgo de desarrollar eventualmente osteoporosis.