Ejemplos de contaminantes del suelo son sustancias químicas tóxicas, pesticidas, plomo, aguas residuales y metales. Otros incluyen ácido, solventes y herbicidas. Las cenizas sobrantes pueden penetrar en el suelo a través de la producción y eliminación de carbón.
Los pesticidas se utilizan para erradicar los insectos que dañan los cultivos, pero los productos químicos sobrantes pueden permanecer en el suelo durante décadas. Estos productos químicos permanecen en el suelo porque los elementos contenidos en el interior no se descomponen. Por ejemplo, el pesticida DDT se ha encontrado en el suelo 40 años después de su aplicación. Se pueden encontrar rastros de estos químicos en las plantas, y los residuos pueden llegar a las mascotas y los hogares.
Los contaminantes industriales en forma de plomo y solventes tampoco son biodegradables. Estos son subproductos sobrantes de los centros de fabricación. Un ejemplo es la dioxina, un peligro industrial común que es un remanente sobrante cuando los productos de desecho se incineran. Estas toxinas también se escapan al aire y terminan en el suelo cuando el agua de lluvia cae sobre el suelo.
La lluvia ácida es un excelente ejemplo de una sustancia química peligrosa que se filtra hacia el suelo. La lluvia ácida es causada por eventos naturales, como la actividad volcánica, pero ciertas industrias también pueden causar este fenómeno. Por ejemplo, la industria de los combustibles fósiles puede crear lluvia ácida. La lluvia ácida contiene altas cantidades de azufre y nitrato, que son ácidos que destruyen los nutrientes y los minerales en el suelo que las plantas y los árboles necesitan para sobrevivir.