Si bien el núcleo alberga el material genético de la célula, el núcleo contiene ribosomas en desarrollo. El núcleo está rodeado por una doble membrana porosa y el núcleo está formado por proteínas de ARN ribosomal.
El núcleo es responsable de muchos de los procesos de la célula y lleva su información esencial, y el nucleolo se encuentra dentro de él. Dentro del núcleo hay todo lo que la célula necesita para cumplir su función. Alrededor del exterior, hay una membrana porosa, que permite el paso de iones, agua, ATP para obtener energía y otras micromoléculas. El ADN dentro del núcleo permanece en el interior, pero puede transmitir información fuera de la célula en forma de ARNm. Esto hace posible la reproducción y otros procesos celulares.
En contraste, el nucleolo tiene una tarea muy específica, que es la fabricación de ribosomas. Al igual que el núcleo, tiene un pequeño papel en la mediación de los procesos de señalización celular y es particularmente útil cuando se responde a factores estresantes celulares. A diferencia del núcleo, no presenta una membrana celular. En la mayoría de las células diploides humanas hay un núcleo, aunque aparecen hasta 10 durante la mitosis. La matriz no está bien organizada. Está compuesto principalmente de moléculas de ARNr, por lo que no es tan diverso como el núcleo.