La espondilosis, también conocida como enfermedad degenerativa del disco, es una afección de la médula espinal causada por el deterioro de los discos intervertebrales, según la clínica Mayfield. La espondilosis puede afectar la región cervical, lumbar o torácica espina.
La espondilosis se produce como resultado del proceso natural de envejecimiento de la columna vertebral. A medida que una persona envejece, los discos espinales se encogen gradualmente, se secan y se descomponen. Estos cambios hacen que los discos vertebrales pierdan su flexibilidad y capacidad de amortiguar la columna vertebral, explica WebMD.
Los síntomas de la espondilosis varían de persona a persona. Según MedlinePlus, los síntomas comunes de la espondilosis incluyen dolor de cuello o espalda, dolores de cabeza y entumecimiento periférico o en el hombro. La pérdida de equilibrio y la incontinencia urinaria o intestinal, aunque no es común, también pueden experimentarse.
Varios factores aumentan las posibilidades de una persona de desarrollar espondilosis, explica la Academia Americana de Cirujanos Ortopédicos. Estos factores de riesgo incluyen un historial familiar de dolor de cuello, problemas de salud mental, una lesión espinal previa, fumar y una ocupación que involucra movimientos frecuentes del cuello y trabajo en la cabeza.
A los pacientes con espondilosis a menudo se les recomienda someterse a terapia física, afirma la Academia Americana de Cirujanos Ortopédicos. También se prescriben medicamentos para el dolor y antiinflamatorios. Los tratamientos no quirúrgicos de la espondilosis también incluyen collares blandos, inyecciones a base de esteroides y bloqueo epidural cervical. La cirugía a menudo se reserva para pacientes que no responden a otros tratamientos.