Los derechos económicos son parte de una gama de principios legales basados en la filosofía de las obligaciones humanas culturales y sociales en las que se preservan la igualdad y la libertad económica. Los derechos económicos y sociales son otorgados a los estadounidenses por el Gobierno en un esfuerzo por garantizar que los ciudadanos tengan la capacidad de mantener sus necesidades.
Los principales derechos económicos y sociales incluyen el derecho a la educación, el derecho a la alimentación, el derecho a la salud, el derecho a la vivienda, el derecho a la seguridad social y el derecho al trabajo. Estos derechos no garantizan que todos los ciudadanos estadounidenses tengan todo esto, pero sí garantizan que a cada ciudadano estadounidense se le dará la oportunidad de tener todos estos derechos básicos. El gobierno debe respetar, proteger y ayudar a cumplir con todos estos derechos económicos humanos básicos.
Estos derechos fueron creados para garantizar que todos los estadounidenses tengan la oportunidad de tener todos los medios necesarios para vivir. Estos derechos no se basan en el género, la edad o la raza, y se aplican a todos los adultos en los Estados Unidos. Estos derechos no se pueden quitar, pero se pueden restringir en función de las decisiones que el ciudadano haya tomado y las circunstancias que hayan creado para sí mismos. Todos los estadounidenses tienen derecho a estos derechos, pero no todos los estadounidenses optan por utilizar los derechos para ayudar a mejorar sus vidas.