Las cuatro actividades económicas son el mantenimiento, la producción, la distribución y el consumo de recursos. Para que una economía funcione correctamente, debe mantenerse un equilibrio de las cuatro actividades.
Las cuatro actividades económicas son esenciales para el establecimiento, el crecimiento y la vida útil de cualquier economía. La gestión de recursos se refiere a las existencias de recursos disponibles que contribuyen a la calidad y conservación de la vida. La producción toma recursos y produce productos, incluidos bienes y servicios. La distribución es el proceso por el cual todos los bienes y servicios son compartidos. Los mercados son lugares donde se produce el intercambio. A diferencia de los intercambios, las transferencias son distribuciones otorgadas sin expectativa de devolución. El consumo es el uso final del bien o servicio.