La mayoría de las costillas fracturadas se curan en un mes o dos, afirma la Clínica Mayo. Mientras la costilla está sanando, es muy importante controlar el dolor para que el paciente pueda respirar cómodamente. Cuando una costilla resquebrajada impide la respiración profunda, pueden producirse afecciones pulmonares como neumonía.
La mayoría de las lesiones en las costillas son grietas en lugar de roturas completas en el hueso, dice la Clínica Mayo. Por lo general, son causados por lesiones en el pecho por accidentes, caídas o deportes. Estas grietas no son tan peligrosas como las rupturas reales de las costillas, en las que los bordes afilados del hueso pueden penetrar en los vasos sanguíneos u órganos internos.
Las costillas rotas pueden causar complicaciones graves, especialmente si se rompen varias costillas o si las costillas están cerca de órganos vitales, explica la Clínica Mayo. Las tres costillas en la parte superior de la caja torácica están muy cerca de los vasos sanguíneos que rodean el corazón. Un borde dentado de una de estas costillas puede cortar la aorta u otro vaso. Las costillas del medio se encuentran cerca de los pulmones y un borde afilado puede causar una lesión pulmonar. Mientras que las dos costillas inferiores son más flexibles que las otras costillas y se rompen con menos facilidad, una ruptura en una de ellas puede perforar el bazo, el hígado o los riñones.