El "Espejo" de Sylvia Plath es un poema que trata íntimamente la idea de que las mujeres busquen distinciones entre el yo real y el falso. Utiliza el espejo titular como su dispositivo simbólico central.
Muchos de los poemas de Plath tratan sobre las complejidades de definir la condición de mujer y la existencia en un espacio femenino. "Mirror" enfrenta este problema directamente, deteniéndose en los desafíos planteados por cada etapa de la vida de una mujer y por la relación íntima entre la feminidad y el espejo como símbolo de introspección.
Los símbolos ilustrativos de los temas de "Mirror" incluyen:
- El espejo como agua en referencia a Narciso.
- El poder imaginado del espejo para juzgar y evaluar.
- La proyección de estados pasados y futuros en una reflexión actual.
Al investigar el yo por medio de la reflexión, Plath se enfrenta a la idea de que gran parte de la autoevaluación femenina está distorsionada por marcos erigidos por la sociedad. Su narrador teme lo que el futuro traerá, comparando la llegada de su futuro yo, su vejez y la pérdida de su juventud, a un pez grande y terrible que se eleva hacia la superficie. La superficie del espejo es una barrera entre la mujer y el autoconocimiento.
El poema de Plath también trata el deseo humano de revertir el proceso de envejecimiento. Hace referencia a la iluminación y al entorno como una forma en que los humanos se engañan a sí mismos para creer que pueden mantener su juventud.