El león y el cordero se usan simbólicamente en la Biblia para ilustrar las cualidades opuestas que conforman tanto a Dios como a los seres humanos. Estas cualidades contrastantes de fuerza y ferocidad (león) y amabilidad y docilidad (cordero) también a las relaciones entre los seres humanos y Dios.
Ambos animales aparecen muchas veces en la Biblia. La frase frecuentemente citada "el león se acostará con el cordero" es en realidad una amalgama de dos pasajes en la Biblia del libro de Isaías, versículos 11: 6 y 65:25. Ambos pasajes describen cómo será el mundo después del regreso de Jesús a la tierra como se predice en la Biblia.