Los maestros religiosos hindúes se llaman gurúes, y su función es actuar como mediador entre el alma y el Supremo, mientras que también actúa como intérprete y maestro del shastra, y como voz de lo divino. /strong> Los gurús a menudo toman discípulos, conocidos como diksha.
Se dice que las escrituras hindúes se han transmitido originalmente a través de la tradición oral. La transmisión oral original de la escritura se llama shabdabrahman. Las enseñanzas de las escrituras hindúes también se conocen como conocimiento védico.
El rol y el estado de un gurú a menudo dependen de la escuela del hinduismo. Advaita, por ejemplo, coloca al gurú al mismo nivel que Dios, mientras que otras escuelas, como el bhakti, afirman que un gurú es un maestro y un medio para Dios, que nunca puede convertirse en Dios.
La autodisciplina es fundamental para el hinduismo, por lo que es importante tener un maestro y guía espiritual. Un gurú no solo ayuda a un discípulo a entender las palabras y el significado de las Escrituras, sino que también ayuda a cultivar y fomentar la autodisciplina y el crecimiento espiritual que un discípulo necesita para poder entender completamente las Escrituras.
Hay varias analogías en el hinduismo que enfatizan la importancia del maestro, como el hecho de que los niños pequeños deben depender de su madre y que los libros por sí solos no son suficientes para impartir un conocimiento real.