Una cascada es una característica del agua a lo largo de un arroyo con una caída vertical en el lecho del arroyo. Esta caída hace que el agua caiga sobre un borde, lo que le da al término su característica definitoria.
Hay muchos nombres descriptivos utilizados para las cascadas. Hay cascadas de "cataratas", que son grandes, potentes y con frecuencia asociadas con rápidos, y cascadas de "cascada", que tienen varios niveles o pasos a medida que el agua desciende. Si el agua simplemente se hunde sobre un borde y cae libremente en una piscina debajo, se le llama cascada "de inmersión".
Si una corriente ancha simplemente cae sobre un borde igualmente ancho que presenta el aspecto de una lámina de agua que cae, es una cascada de "lámina". Si el agua que pasa permanece en contacto con la superficie rocosa de las cataratas, se puede describir como una cascada de "cola de caballo". También hay cascadas "escalonadas" en las que el agua pasa por un borde y aterriza en una piscina, pero inmediatamente cae sobre otro borde.
Una cascada puede ser natural o artificial dependiendo de si la intervención humana estuvo involucrada en su realización. Una cascada podría describirse por el volumen de agua que la recubre, así como por la forma en que el volumen varía según la estación o la etapa de inundación. Una cascada también se puede describir por su anchura, altura, la niebla producida, su sonido y su apariencia general. Las cataratas pueden ser difíciles de definir científicamente, y los geólogos a menudo no están de acuerdo en dónde se encuentra el verdadero comienzo y final de una cascada.