¿Cómo los insectos se protegen a sí mismos?

Los insectos usan una variedad de mecanismos de defensa para evitar la depredación, incluidas las defensas químicas, correr, volar, simular y camuflarse. Sin embargo, estas son solo algunas de las tácticas y estrategias empleadas por el grupo entero.

La Universidad Estatal de Carolina del Norte explica que cuando un depredador agarra una pata de algunas especies de insectos, como las moscas de la grulla, el insecto puede romper el apéndice. Llamada autotomía, esta técnica también se emplea en bastones, saltamontes y otras especies de patas largas. Algunos insectos regeneran sus extremidades perdidas, pero incluso entre aquellos que no lo hacen, el apéndice faltante por lo general no es una carga grave.

Otras especies, particularmente una serie de orugas, usan cerdas, espinas o pelos para defenderse. Algunos de estos pelos disuaden a los depredadores por medios mecánicos. Por el contrario, otros tipos de cabello, como las espinas de las orugas de silla de montar, inducen dolor o picazón al contacto. Estas estructuras se denominan pelos urticantes.

Otros insectos, como las avispas familiares, las abejas y las hormigas, producen veneno que se entrega a través de un aguijón hueco. Ubicados en la parte posterior del abdomen, estos aguijones son en realidad ovipositores modificados. El veneno usado por estos insectos a menudo causa dolor, pero, en algunos casos, también puede causar una reacción alérgica en el depredador.