Los caballos sudan por los poros de todo el cuerpo, de manera similar a los humanos. A diferencia de los humanos, el sudor de caballos contiene la proteína latherin, que ayuda a extender el sudor sobre el cuerpo del caballo para una evaporación más rápida. Esta proteína le da al sudor del caballo una sensación jabonosa similar al detergente para ropa.
Mientras trabaja o hace ejercicio, un caballo pierde 4 galones de agua por hora. Cuando los caballos sudan, también pierden los iones de sodio y cloruro conocidos como electrolitos. La pérdida de electrolitos ocasionalmente evita que los caballos sientan la necesidad de beber. Esto conduce a la deshidratación. Se debe tener precaución cuando se trabaja o se ejercita un caballo en momentos de mucho calor o humedad.