Si bien hay varias razones para las pruebas de función renal anormales, una de las principales preocupaciones es la enfermedad renal temprana, según Healthline. Al recibir estos resultados de la prueba, los pacientes deben hablar con un médico acerca de la adecuada terapia para la condición subyacente.
Según Healthline, los pacientes que experimentan una función renal anormal debido a la hipertensión se benefician de los medicamentos para disminuir la presión arterial. Un médico también puede sugerir modificaciones en el estilo de vida y la dieta. El Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre recomienda seguir la dieta DASH, que limita el sodio y la grasa.
Si la función renal anormal se debe a la diabetes, Healthline recomienda consultar a un endocrinólogo. Estos especialistas tratan enfermedades metabólicas. Seguir los consejos de un endocrinólogo y adoptar cambios saludables en el estilo de vida ayuda a los diabéticos a mejorar el control de la glucemia y preservar la función renal.
Los cálculos renales también afectan los resultados de una prueba de función renal. La Clínica Mayo sugiere varios cambios en el estilo de vida para prevenir los cálculos renales, como beber más agua y limitar la cantidad de proteínas y oxalatos en la dieta. Un médico también puede recetar medicamentos para ayudar a disolver las piedras.
Healthline recomienda que las personas con pruebas de función renal anormales hablen con un médico acerca de las pruebas regulares. Las pruebas de seguimiento le permiten al médico determinar si las acciones tomadas para tratar las afecciones subyacentes están teniendo un efecto positivo.