De acuerdo con la fe cristiana, temer al Señor significa tener reverencia y respeto por Dios y sus enseñanzas. Se refiere a una actitud cristiana positiva que resulta en obediencia y un temor saludable de las consecuencias para desobedeciendo la palabra de Dios.
Según Christianity Today, temer a Dios es algo bueno porque evita que las personas se rindan al pecado. Saber que alguien teme a Dios puede realmente establecer un sentido de confianza para esa persona y un sentimiento de que es confiable. Puede indicar que se puede confiar en la palabra de esta persona y que trata a los demás con respeto.
Los católicos romanos enseñan que el temor de Dios es uno de los Siete Dones del Espíritu Santo. Se considera el fundamento de la sabiduría al dar a los cristianos un respeto por Dios que les hace evitar hacer cosas que lo ofenderían.
El miedo al Señor no es lo mismo que temer algo peligroso o negativo. En cambio, es una sensación de asombro que viene como resultado del amor cristiano y el respeto por Dios. El temor a Dios también resulta en una voluntad de obedecerlo y cumplir con las normas establecidas en la Biblia. Alienta a los cristianos a pensar como Dios y rechazar el mal.