La diferencia entre percepción y actitud es que la percepción es el uso de la mente o los sentidos para comprender o comprender el entorno de una persona, mientras que la actitud es el sentimiento real o la forma de pensar de una persona o alguien en función de sus percepciones . Existe un vínculo intrínseco entre percepción y actitud.
La percepción y la actitud son dos factores que influyen en la vida cotidiana de una persona, incluido su lugar de trabajo y el desempeño de la organización. Un ejemplo de una actitud negativa sería una persona que sale del trabajo temprano o toma descansos extra largos. Sin embargo, es posible que esta persona no vea esta actividad como una actitud negativa hacia el trabajo porque puede haber percibido que el trabajo es aburrido o que su situación en el lugar de trabajo es injusta debido a las largas horas de trabajo o la baja remuneración. Esto da como resultado la justificación que lleva a la persona a tomar descansos extra largos o a abandonar el trabajo antes de tiempo. Otros compañeros de trabajo pueden estar de acuerdo con las acciones de este individuo y otros no. Las diferentes percepciones de los compañeros de trabajo conducen a actitudes diferentes acerca de la ausencia de la persona.
En general, la actitud se divide en dos constructos: positivo y negativo. La actitud positiva significa que una persona ve la vida a través de una mentalidad de "vaso medio lleno", mientras que la actitud negativa significa que una persona ve la vida a través de una mentalidad de "vaso medio vacío". La percepción y la actitud también son dos constructos que tienen prejuicios culturales, religiosos, tradicionales y étnicos para muchas personas.