Si un olor a quemado proviene del congelador, esto generalmente significa que el compresor u otro componente eléctrico se ha quemado. Esto puede ocurrir debido a que el motor del compresor funciona con demasiada frecuencia. Dependiendo de la antigüedad de la unidad del refrigerador, es posible que deba reemplazarse.
El compresor es la fuerza impulsora detrás de la circulación de aire a través de los tubos de refrigeración. El termopar del refrigerador determina cuándo se enciende el compresor y comienza a circular aire. Si el termopar falla, o si el refrigerador está sobrecargado con elementos que evitan que el aire circule efectivamente, hace que el compresor trabaje demasiado y se queme.
Cuando este proceso ocurre en un congelador, es posible que se acumule hielo alrededor de las bobinas. Por lo tanto, es necesario descongelar el congelador a intervalos regulares si no lo hace automáticamente. Además, el propietario debe evitar colocar el refrigerador demasiado cerca de una fuente de calor, y debe inspeccionar periódicamente los sellos para asegurarse de que estén herméticos.
Un cableado defectuoso o enchufes sueltos también pueden causar que el compresor y otras partes eléctricas se quemen. Si el cable está desgastado o si el enchufe no permanece sentado en el tomacorriente, la unidad debe repararse o reemplazarse inmediatamente para evitar un incendio.