Un ejemplo de defensa perceptiva que a menudo se señala es un estudio realizado por Elliot McGinnies donde los participantes vieron muchas palabras destellantes, pero no reportaron la cantidad de palabras ofensivas. La defensa perceptiva es una teoría que las personas pueden proteger a sí mismos de percibir un estímulo externo que es negativo.
Si bien hay algunas pruebas cuestionables que apuntan a la defensa perceptiva, no hay pruebas sólidas de ello. La explicación más probable de los resultados del ensayo de McGinnies fue que los participantes no querían ofender a nadie más al repetir las palabras "negativas". Para que alguien no perciba algo negativo, primero tendrían que percibirlo y decidir que es negativo, y luego no percibirlo, lo cual es imposible.