Un compuesto es un material hecho de dos o más elementos químicos que se han adherido. Los dos tipos principales de enlaces compuestos son enlaces covalentes y límites iónicos.
En química, los átomos se unen para crear diferentes tipos de compuestos al compartir o transferir electrones de un elemento a otro. Cuando un enlace es compartido, es un enlace covalente. Los electrones transferidos se producen en enlaces iónicos. También es importante tener en cuenta la diferencia entre un compuesto y una mezcla. En una mezcla, diferentes sustancias se mezclan, pero los átomos de cada sustancia en una mezcla no se unen. Algunas sustancias solo forman una mezcla cuando se juntan, pero otras se unen inmediatamente. Este proceso puede ocurrir gradualmente, como cuando el hierro entra en contacto con el oxígeno para formar óxido. En otras ocasiones, un compuesto se forma más rápidamente, como cuando se mezclan oxígeno y litio.
Un ejemplo clásico de un compuesto ocurre con los elementos de hidrógeno y oxígeno. Estos elementos están en forma de gas a temperatura ambiente. Sin embargo, el compuesto que se forma a partir de ellos, el agua, existe en forma líquida. Esto demuestra cómo un compuesto de dos elementos es totalmente diferente de los elementos que forman el compuesto.