Un carbohidrato complejo producido por las plantas es la celulosa. Los carbohidratos complejos son azúcares compuestos de moléculas de azúcar más pequeñas. Los carbohidratos complejos también se llaman polisacáridos. La celulosa se compone de subunidades de un monosacárido, o azúcar simple, llamada glucosa.
La celulosa en las plantas se encuentra en las paredes celulares de las plantas. La celulosa da a las células vegetales una estructura rígida. Este complejo de carbohidratos no puede ser degradado por el sistema digestivo humano. Animales como los caballos y las vacas pueden descomponer la celulosa con la ayuda de bacterias simbióticas que viven en sus sistemas digestivos. La celulosa es un componente importante de la fibra dietética.
El otro carbohidrato complejo producido por las plantas es el almidón. El almidón es una forma de almacenamiento de glucosa. Al igual que la celulosa, el almidón está formado por subunidades de glucosa, pero a diferencia de la celulosa, el almidón se puede descomponer mediante enzimas en el sistema digestivo humano.