WebMD explica que existen numerosos tranquilizantes que se consideran seguros para los gatos en el curso del uso a corto plazo, pero deben obtenerse a través de un veterinario. Los tranquilizantes se usan para aliviar la ansiedad en un gato asustado que no está acostumbrado a las experiencias potencialmente traumáticas, como peregrinar, viajar o visitar al veterinario.
Según WebMD, los tranquilizantes funcionan al bloquear los impulsos inhibitorios corticales, que pueden tener una reacción adversa en algunos gatos. Los posibles efectos secundarios incluyen la falta de uso de la caja de arena o la agresión, por lo que se recomienda su uso solo cuando se necesita sedación. El sitio web enumera a Promace como uno de los medicamentos más efectivos para reducir la ansiedad en los gatos al tiempo que suprime su centro de dolor. Sin embargo, puede tener efectos secundarios graves y no debe utilizarse a largo plazo.
WebMD también recomienda Valium, una droga popular entre los terapeutas del comportamiento de gatos y humanos para reducir la ansiedad y promover la relajación. All Feline Hospital señala que Benadryl puede usarse como un sedante felino como último recurso, ya que los gatos generalmente se oponen al sabor de los medicamentos de venta libre. Ya que Benadryl se puede obtener fácilmente en la tienda, es una opción popular para aquellos que no tienen tiempo de obtener un sedante del veterinario antes de ir de viaje con su gato.