Un proceso isobárico es un proceso termodinámico que se produce a presión constante. En tales procesos, el volumen de la sustancia o gas calentado puede variar con la temperatura. Un ejemplo de un proceso isobárico es la expansión del gas para impulsar un pistón que se mueve libremente.
El calor se transfiere en un proceso isobárico, lo que aumenta la energía interna del sistema. Este aumento de la energía interna se utiliza para hacer el trabajo. El trabajo realizado por un gas ideal a una presión constante se calcula mediante la ecuación: W = p * delta-V. W representa el trabajo, p es la presión y delta – V es el cambio en el volumen.