El proceso de toma de decisiones de seis pasos se llama toma de decisiones racional, y utiliza el análisis y los hechos para tomar una decisión. Los pasos son definir el problema, identificar los criterios de decisión, clasificar el criterios, desarrollando soluciones alternativas, evaluando las soluciones y seleccionando la mejor solución. Este modal de toma de decisiones hace algunas suposiciones, como tener un problema claramente definido y la capacidad de identificar todas las soluciones posibles.
Para completar el primer paso en el proceso racional de toma de decisiones, uno debe identificar el problema y luego declarar el resultado deseado después de que se resuelva el problema. El siguiente paso es identificar los criterios de decisión al determinar qué factores son relevantes para tomar la decisión. Los criterios identificados generalmente reflejan los valores y las preferencias personales del tomador de decisiones, y cualquier criterio que no se identifique en este paso se considera irrelevante para quien toma las decisiones. El tercer paso consiste en clasificar los criterios al determinar la prioridad de cada criterio en la decisión. A continuación, se desarrollan posibles soluciones, pero no se consideran. En el quinto paso, el responsable de la toma de decisiones debe analizar y evaluar críticamente cada solución, sopesando las fortalezas y debilidades de cada una de acuerdo con los criterios establecidos en los pasos segundo y tercero. El paso final concluye el proceso mediante la selección racional y crítica de la solución óptima.