El pensamiento analítico es el proceso de pensamiento que implica dividir un problema en varias partes y pensar en cada parte para encontrar una solución. Se puede usar para resolver una variedad de problemas, y es común utilizado en análisis de sistemas y análisis de costo-beneficio.
Aprender a implementar el pensamiento analítico requiere práctica. El solucionador de problemas debe dividir el problema en partes más pequeñas y luego analizar cada pieza a fondo. Una vez que una persona sabe cómo las piezas encajan y se relacionan unas con otras, la persona generalmente puede resolver el problema con bastante facilidad.
El pensamiento analítico se usa con bastante frecuencia en la redacción de artículos de secundaria y universitarios. A los estudiantes se les asigna una tarea y se les dice que analicen un texto antes de escribir una conclusión o argumento. Cuando esto sucede, los estudiantes deben recordar buscar sesgos, evaluar la evidencia en el texto e identificar agendas ocultas que puedan estar presentes.
Una vez que se han abordado estas y otras preguntas, los estudiantes pueden comenzar a escribir sobre sus hallazgos. Al escribir un artículo, el autor debe aplicar los principios analíticos al artículo. El autor debe elaborar la conclusión al principio del documento para que el autor pueda respaldarla con evidencia. Todas las técnicas utilizadas en el análisis de una tarea deben aplicarse al papel que el estudiante está escribiendo.