La enfermedad que Kevin tiene en el libro "Freak the Mighty" es el síndrome de Morquio. El autor, Rodman Philbrick, identifica el síndrome de Morquio como una forma rara de enanismo.
En el libro, a Kevin se lo describe como si usara aparatos ortopédicos y muletas. Esto parece corresponder con el desarrollo anormal del hueso y las rodillas de golpe que son típicas de los pacientes con síndrome de Morquio.
El síndrome de Morquio causa problemas óseos que pueden provocar parálisis y complicaciones cardíacas potencialmente fatales. En "Freak the Mighty", Kevin sufre un ataque y va al hospital; cuando el narrador, Max, vuelve a visitarlo al hospital, le dicen que Kevin murió porque "su corazón se volvió demasiado grande para su cuerpo".