Los budistas no creen en un Dios todopoderoso, como creen los seguidores de la tradición religiosa abrahámica. En cambio, los budistas creen que los orígenes de la creencia en un Dios omnipotente surgieron del miedo. Los budistas se adhieren a las enseñanzas de Buda para asegurarse de que están viviendo con atención y siguiendo el camino de la bondad.
El Buda, o "el iluminado", no es un Dios en la tradición budista. Era un hombre de verdad llamado Siddartha Gautama. Gautama nació en 563 aC en lo que hoy es Nepal. A la edad de 29 años, se dio cuenta de que la riqueza y el poder no manifiestan la felicidad en sí mismos.
Nacido en una familia real, Gautama buscó la iluminación de manera diferente a sus predecesores. Estudió meditación durante seis años, hasta que llegó a un lugar de iluminación. Pasó el resto de su vida enseñando el camino de la iluminación a sus seguidores.
Para los budistas, el budismo es una filosofía y una forma de vida, no una religión. El budismo enseña a sus seguidores a llevar una vida moral y mantener una conciencia crítica de las acciones de uno. Los budistas buscan desarrollar sabiduría y entendimiento al poner en práctica el dharma. Dharma se refiere a las formas de vida que mantienen a uno de acuerdo con el camino budista. El budismo promueve la paz, el amor y la comprensión de todos los seres vivos para alcanzar la felicidad.