Dependiendo de la sombra, el amarillo va bien con los rojos, marrones, blancos, rosas, azules, verdes y púrpuras. El amarillo claro se ve bien con blanco, rosa y verde. Amarillo brillante va bien con púrpura, verde y azul. Amarillo oscuro se ve bien con marrones, cremas, verdes y azules.
Debido a la forma en que existen los diferentes tonos y cómo estos afectan el resultado visual general, el amarillo es un color difícil. Por ejemplo, el amarillo pastel (claro) debe combinarse con tonos igualmente claros, y no con un color intenso como el rojo brillante. Mire hacia la rueda de colores e intente elegir colores cercanos al tono de amarillo que está utilizando o directamente a través de ella, como el púrpura. El contraste visual es bueno para los ojos y mantendrá el interés alto. Recuerde usar el amarillo en pequeñas dosis, a menos que sea un tono pastel, ya que puede causar esfuerzo en los ojos si hay demasiado presente. El amarillo es un gran color para representar la primavera y la vida, y puede hacer que un espacio o pieza de arte se sienta más brillante y más amigable. También se puede usar para indicar "precaución" y captar atención, como en un letrero de la calle o como punto focal de una habitación.