Las jirafas pueden doblar las rodillas, y lo hacen a veces cuando beben o se acuestan para dormir. Cuando beben, las jirafas doblan las rodillas de sus patas delanteras o las abren para que puedan llegar agua.
Para dormir, una jirafa a veces dobla las piernas debajo de su cuerpo. Lo logra arrodillándose sobre sus rodillas delanteras y bajando su cuerpo. Para levantarse de esta posición, la jirafa se pone de rodillas, extiende sus patas traseras, levanta sus cuartos traseros y endereza sus patas traseras. Debido a que subir y bajar es bastante difícil para las jirafas y aumenta su vulnerabilidad al ataque, a menudo duermen mientras están de pie.