Según Repair Clinic, la razón más común por la que un horno no se calienta es debido a un problema con el encendedor. Los hornos eléctricos y de gas tienen encendedores. El encendedor es un elemento esencial que ayuda a que el horno se encienda y se caliente. Cuando el encendedor falla, debe ser reemplazado.
Todos los hornos tienen un elemento de encendido que controla la temperatura del horno. Normalmente, cuando se enciende el horno, el encendedor se activa y hace que una válvula eléctrica o de gas permita que el calor ingrese al horno. En los hornos de gas, el encendedor enciende una corriente de gas.
Hay varios otros problemas que pueden hacer que un horno deje de producir calor. Si el problema no es el encendedor, los elementos de hornear y asar, la placa del circuito del horno, el cableado, el regulador de presión, el fusible térmico o el termostato pueden estar fallando. Un técnico verifica estos problemas, diagnostica el problema y corrige cualquier problema con el consentimiento del propietario.
Cuando el horno funciona con calor de gas, es importante estar alerta al olor del gas. El gas puede llenar rápidamente la cocina, lo cual es peligroso. Apague completamente un horno que no esté calentando adecuadamente y comuníquese con un técnico de reparación de electrodomésticos para diagnosticar y solucionar el problema.