Las razones por las que un cachorro puede beber cantidades excesivas de agua incluyen deshidratación, medicamentos, dieta y afecciones médicas. De acuerdo con WebMD, no es fácil para una persona promedio determinar si un perro está bebiendo Cantidad excesiva de agua, por lo que es mejor para los dueños de perros preocupados consultar al veterinario.
La deshidratación en un perro puede ser causada por calor, ejercicio o enfermedad. Además del aumento de la sed, los síntomas de deshidratación de un perro incluyen letargo, encías secas, lengua seca y saliva espesa parecida a una cuerda. La deshidratación puede ser potencialmente mortal y debe buscarse atención veterinaria de inmediato.
A veces, una mala alimentación puede hacer que un perro beba más. El consumo excesivo de alcohol puede ser causado por alimentos salados o azucarados o podría ser una reacción alérgica a los alimentos. Los alimentos secos o las dietas bajas en proteínas también pueden aumentar la sed de un perro.
Algunos medicamentos pueden hacer que el perro sufra de sed excesiva. Los medicamentos utilizados para tratar la inflamación, la insuficiencia cardíaca o las convulsiones pueden tener efectos secundarios que incluyen sed excesiva.
La enfermedad renal, la enfermedad hepática, la diabetes, la disfunción suprarrenal, la disfunción tiroidea, ciertos cánceres, los desequilibrios hormonales, las infecciones del tracto urinario y otras enfermedades pueden hacer que los perros beban en exceso. Como muchas de estas afecciones médicas son potencialmente mortales, es importante que los dueños de perros consulten con un veterinario cada vez que el patrón de consumo de un perro cambie significativamente.