La importancia de la demografía radica en su contribución para ayudar al gobierno y la sociedad a prepararse mejor para enfrentar los problemas y las demandas del crecimiento de la población, el envejecimiento y la migración. por ejemplo, ayuda en el desarrollo de sistemas escolares adecuados, estima el financiamiento requerido para los servicios para personas mayores y desarrolla sistemas de salud que funcionen. Una amplia variedad de resultados sociales se ven afectados por los procesos demográficos y las distribuciones.
Los análisis derivados de estudios demográficos se basan en un conjunto especializado de modelos y métodos, que incluyen estudios de composición de poblaciones, análisis de tablas de vida, simulación y modelos matemáticos, análisis de supervivencia y proporciones. La demografía se encuentra en la encrucijada de varias otras disciplinas, incluidas la economía, la sociología y la epidemiología.