Cada estado tiene leyes diferentes con respecto a las mascotas exóticas, y los ciervos están incluidos en esta categoría. En la mayoría de los estados, es ilegal tener una mascota exótica a menos que el propietario reciba un permiso especial.
Los ciervos cautivos representan una amenaza para la vida silvestre, los animales domésticos y las personas que los rodean. Como se guardan en corrales pequeños, es fácil transmitir las enfermedades. Las personas que se encuentran con ciervos bebés en la naturaleza deben dejarlos, ya que las madres suelen estar en el área cercana. Si los humanos tocan al bebé cervatillo, la madre puede abandonarlo. Para poder tener un ciervo como mascota, las personas generalmente deben comunicarse con el Departamento de Recursos Naturales del estado para obtener un permiso.