La placa base de una computadora normalmente se encuentra en la parte inferior de la carcasa de la computadora. La placa base es una pieza de plástico o fibra de vidrio que contiene varios circuitos, interruptores y componentes electrónicos. Entre otras funciones, la placa base asigna capacidad de memoria y procesador a varias funciones de la computadora. También se conecta a varios equipos, como tarjetas de sonido y tarjetas de red, para que puedan comunicarse.
Las placas base se empezaron a usar en computadoras personales a fines de los años 80 y 90, a medida que el hardware mejoraba y era más económico de usar. A fines de la década de 1990, las placas madre admitían muchas funciones, incluyendo audio, video y almacenamiento, sin el requisito de tarjetas de expansión adicionales en la computadora. A partir de 2014, las placas base vienen en una variedad de tamaños y formas para adaptarse a varias computadoras. Las computadoras portátiles suelen utilizar placas base pequeñas y altamente personalizadas, que son costosas de reparar o actualizar.
Las placas madre normalmente se enfrían con ventiladores dentro de la computadora. La refrigeración insuficiente puede dañar los componentes de la computadora y provocar fallos. Algunas computadoras diseñadas para un uso silencioso no incorporan ventiladores y requieren un procesador de baja potencia y una ubicación específica de los componentes para evitar el sobrecalentamiento. A partir de 2014, los investigadores del fabricante estadounidense de procesadores de computadoras Intel notaron que las placas madre fallan a un ritmo alto en China e India. Atribuyen la falta de contaminación del aire generada por la combustión del carbón que causa la corrosión de los circuitos de las computadoras.