Los cuernos de rinoceronte se componen de una proteína fibrosa llamada queratina, que es la misma sustancia que se encuentra en las uñas y el cabello humano. La queratina también está presente en las plumas, garras y cascos.
El cuerno de un rinoceronte no está unido a su cabeza, sino que es una masa compacta de cabello que continúa creciendo durante toda su vida. El centro del cuerno contiene dos depósitos minerales que explican la curva y la punta afilada. El calcio fortalece la bocina y la melanina protege el núcleo de la radiación solar ultravioleta. La composición de la queratina depende de la dieta y ubicación geográfica del animal. Las muestras de cuerno son similares a las huellas dactilares humanas. Los oficiales de policía usan estas muestras para localizar áreas ilegales de caza furtiva.