El primer terremoto registrado ocurrió en el Monte Tai, ubicado en la provincia de Shandong, este de China. Según la antigua crónica china, los "Anales de bambú", el terremoto tuvo lugar durante el séptimo año de reinado del Emperador Fa como monarca de la dinastía Xia.
Según los "Anales de bambú", la gente creía que tras la muerte del emperador Fa, el Monte Tai se hizo añicos. No hay registros con respecto a la magnitud, las víctimas o el daño a las áreas pobladas circundantes, ya que no hubo un método científico para registrar o predecir la actividad sísmica. En el 132 dC, Zhang Heng, un político chino, inventó el primer sismómetro del mundo, que podía detectar la dirección de un terremoto desde más de 300 millas de distancia.