Los nódulos y tumores benignos de los pulmones generalmente no causan síntomas y se descubren accidentalmente en las tomografías computarizadas y en las radiografías de tórax, como lo indica WebMD. Si se presentan síntomas, pueden incluir dificultad para respirar, sibilancias, tos con sangre, tos duradera o fiebre, especialmente cuando hay neumonía.
Un nódulo aparece como un punto en una tomografía computarizada o una radiografía, y aparece en aproximadamente una de cada 500 radiografías de tórax, según lo confirmó WebMD. Aunque no se conocen bien las causas exactas de los tumores pulmonares benignos y los nódulos, a partir de 2015, pueden deberse a un absceso pulmonar, un hongo infeccioso, tuberculosis, artritis reumatoide o neumonía redonda.
Para descubrir si un tumor o nódulo pulmonar es benigno o canceroso, un médico puede realizar el historial médico del paciente, realizar un examen físico y tomar radiografías repetidas por hasta 2 años, según WebMD. El tumor o nódulo se considera benigno si permanece del mismo tamaño durante este período, y también puede tener un color más uniforme y bordes más suaves que un nódulo canceroso. El médico también puede usar una prueba cutánea de tuberculina, análisis de sangre, imágenes de resonancia magnética o una biopsia para detectar cáncer. Es más probable que un nódulo sea benigno si es pequeño, posee calcio o si el paciente tiene menos de 40 años y no fuma.