Los ejemplos típicos de inercia incluyen el cuerpo de un pasajero que se mueve ligeramente hacia atrás cuando un vehículo arranca repentinamente; el cuerpo de un pasajero se inclina hacia adelante cuando un vehículo en movimiento se detiene y el cuerpo de un pasajero se mueve hacia un lado cuando el vehículo maniobra un giro brusco. La inercia es una de las características definitorias de la materia, que se refiere a la tendencia de cualquier objeto a permanecer en reposo o moverse continuamente a lo largo de una línea recta.
La inercia se clasifica en tres tipos: inercia de reposo, inercia de movimiento e inercia de dirección. Una hoja que cae de la rama de un árbol que es perturbada por un fuerte viento es un ejemplo de inercia de reposo. Una persona que se cae después de saltar descuidadamente de un tren en movimiento es un ejemplo de inercia del movimiento. El lodo que se adhiere a las ruedas giratorias y se lanza de forma tangencial es un ejemplo de inercia de la dirección.