Los ejemplos de carga por inducción incluyen cepillos de dientes recargables y teléfonos inteligentes que se cargan de forma inalámbrica en los muelles de carga. La carga inductiva permite que los objetos se carguen sin estar conectados directamente a una toma eléctrica.
En los productos comerciales, el proceso de carga por inducción es alimentado por bobinas de inducción. En los teléfonos inteligentes, tanto el teléfono como la base de carga contienen bobinas de inducción de hierro envueltas con cable de cobre. Colocar el teléfono en la base de carga da como resultado un campo electromagnético entre las bobinas de inducción. Una vez que se crea el campo electromagnético, la electricidad puede pasar entre las dos bobinas de inducción, cargando el teléfono de forma inalámbrica.
Dos bobinas de inducción no necesitan hacer contacto directo para crear un campo magnético. Basta con colocar las bobinas cerca unas de otras para generar un campo magnético y transferir electricidad.