Las causas más comunes de hinchazón de las rodillas son lesiones, incluidos huesos rotos y ligamentos desgarrados, según la Clínica Mayo. Las lesiones dañan las rodillas, lo que provoca la acumulación de demasiado líquido en la articulación de la rodilla o alrededor de esta . Ciertas enfermedades y afecciones también pueden provocar rodillas hinchadas.
Otras lesiones que pueden causar inflamación de la rodilla incluyen cartílago o lágrimas de menisco, y el uso excesivo de la rodilla, lo que puede causar irritación, afirma la Clínica Mayo. Las condiciones que pueden dar lugar a rodillas hinchadas incluyen bursitis, osteoartritis, artritis reumatoide, tumores e infecciones. Los quistes, la gota y la seudogota también pueden hacer que las rodillas se hinchen.
Los factores de riesgo para las rodillas hinchadas incluyen la edad avanzada y la obesidad, explica la Clínica Mayo. Demasiado peso ejerce presión y estrés en la articulación de la rodilla y en los tejidos que la rodean. Los deportes como el baloncesto pueden torcer la rodilla y provocar rodillas hinchadas. La hinchazón de la rodilla puede provocar debilitamiento muscular, degeneración muscular y sacos llenos de líquido dolorosos.
Los síntomas de rodillas hinchadas incluyen dolor, hinchazón de la rótula y rigidez de la rodilla, señala la Clínica Mayo. Descansar la rodilla, elevar la pierna afectada más alto que el corazón, aplicar una compresión en frío y tomar analgésicos sin receta médica puede ayudar a aliviar los síntomas. Un paciente con una rodilla inflamada debe buscar asistencia médica si los síntomas persisten o si la rodilla se pone roja y sensible.